martes, 31 de enero de 2017

11ª PARADA: TRISTEZA

DIARIO DE VIAJE

11ª PARADA:TRISTEZA

Subimos llenos de energía y vitalidad al tren. A pocos segundos de nuestra marcha el cielo empieza a cubrirse de grandes nubarrones grises, tapando cualquier resquicio azul que recordara a Alegría.
Las nubes cada vez más negras y más compactas convierten el paisaje en un lugar de tonalidades grises.
Pronto rompe a llover amargamente, sin consuelo. Es una lluvia intensa, una espesa cortina de agua apenas deja ver el apagado paisaje.
Una gran llanura peinada por innumerables torrentes y ríos se extiende tras el tupido velo de lluvia. Sauces llorones, campanillas, flores colgantes... toda la vegetación mira hacia la tierra, está decaída, la intensidad de la lluvia no la deja levantarse.
Una gran pena nos invade. Mi corazón está encogido y siento un doloroso nudo en la garganta que no me deja respirar. Mis compañeros de viaje no levantan la cabeza del suelo y ríos salados comienzan a recorrer sus mejillas. Estamos todos sumidos en un profundo y silencioso llanto.

 Una apenada y afligida voz anuncia que hemos llegado a: Tristeza.

Dos cuadros nos reciben en esta esta estación: Mujer que llora de Pablo Picasso y Hombre sentado de Vincent Van Gogh. El precioso concierto en Re menor de Marcello nos acompaña en nuestros recuerdos.






Seguimos la misma secuenciación que en las anteriores.

1. Describo el viaje para que vayan entrando en situación.
2. Leo la definición de la emoción que aparece en el Emocionario.
3. Abrimos una tertulia para hablar cuando sienten esa emoción.
4. Observamos el cuadro y analizamos el color, la composición, las figuras protagonistas...
5. Cierran los ojos y mientras escuchan   imaginan situaciones tristes.
6. Dibujan en la ficha lo que han imaginado escuchando la música de fondo.


Hemos abierto el turno de la tertulia y estas son algunas de las cosas que les entristecen: cuando mi prima se va, cuando nadie quiere jugar conmigo, cuando mi hermano llora, cuando recuerdo a mi bisabuelo, cuando recuerdo a mi padre, cuando pienso en mis mascotas...
Más de la mitad de la clase ha sido incapaz de dibujar, la tristeza no les ha dejado.

He aprovechado este momento tan doloroso para hacer dos ejercicios de mindfullness y ayudarles a que adquieran estrategias para poder sobrellevar mejor el dolor que puedan sentir ante las situaciones que les causan tristeza. 
Siguiendo con el libro Tranquilos y atentos como una rana, hemos practicado el ejercicio 6 "Primeros auxilios para sentimientos desagradables" y el ejercicio 7 "Un lugar seguro".
Después de estos ejercicios los llantos cesaron y parecía que ellos controlaban la tristeza, a diferencia del principio, donde la tristeza los había dominado.

Nos vemos en la siguiente parada: Compasión.


viernes, 13 de enero de 2017

10ª PARADA: ALEGRÍA

DIARIO DE VIAJE

10ª PARADA: ALEGRÍA

Salimos muy contentos de Felicidad. 
El nuevo paisaje parece sacado de un cuento. Los árboles son piruletas retorcidas, rojas y blancas con troncos de regaliz.
A lo lejos se divisan unas montañas de distintos chocolates: blanco, con leche, puro... Un divertido remolino de viento nos trae su delicioso aroma.
El tren sigue su camino con ritmo vivo y desenfadado. Viajando a nuestro lado nos acompaña un chispeante río de purpurina.
De los laterales de nuestros asientos salen unas bolsitas con burbujitas rojas; las introducimos en nuestra boca y empiezan a estallar haciéndonos cosquillas en la lengua y emitiendo pequeños chasquidos que nos hacen reír a carcajadas.
Empieza a llover confeti de colores brillantes metalizados y un arcoiris de serpentinas nos señala el camino hacia la nueva estación.

Una risueña voz nos da la bienvenida a: Alegría.
Decora la estación el cuadro Niños corriendo por la playa de Joaquín Sorolla y suena La boda de Luis Alonso de Gerónimo Giménez.


Seguimos la misma secuenciación que en las anteriores.

1. Describo el viaje para que vayan entrando en situación.
2. Leo la definición de la emoción que aparece en el Emocionario.
3. Abrimos una tertulia para hablar cuando sienten esa emoción.
4. Observamos el cuadro y analizamos el color, la composición, las figuras protagonistas...
5. Cierran los ojos y mientras escuchan La boda de Luis Alonso de Gerónimo Giménez  imaginan situaciones alegres.
6. Dibujan en la ficha lo que han imaginado escuchando la música de fondo.

Esta vez, durante la descripción del trayecto del tren, no han parado de emitir interjecciones de asombro "¡ah!" "¡oh!"y también se les ha escapado alguna risa.
Han entrado de lleno en el mundo que les había preparado para recibir a "Alegría". Y una vez dentro se han dejado llevar por la música y sus emociones, recordando momentos alegres como cuando se reencuentran con un ser querido que llevan tiempo sin ver o reciben una buena noticia o les regalan aquello que más desean.

Nos vemos en la próxima parada: Tristeza.








APRENDER LAS TABLAS ES DIVERTIDO

En una entrada anterior os presenté las tablas en una tabla. Un recurso manipulativo para repasar las tablas.



Siguiendo con la búsqueda para hacer el aprendizaje de las tablas más divertido y menos monótono, he encontrado diferentes recursos.
A este mono tan gracioso le movemos las patitas a los dos números que pretendemos multiplicar y las manos indicarán cual es el resultado.



Con esta tabla han de girar los rodillos para comprobar la solución de la multiplicación.



Similar a los anteriores temenos este libro. Giran para multiplicar y al levantar la solapa tienen la respuesta correcta.

De arco tenemos unas llaves autocorrectivas por las que vamos cruzando un cordoncito y al girar la llave por el reverso comprobamos si el dibujo de nuestro cordón coincide con el que hay grabado en las llave.

Y este es sin duda el más divertido. Elegimos la tabla que queremos practicar y la ponemos al centro. A su alrededor colocamos las moscas con los diferentes resultados. Tiramos el dado, y el número resultante lo multiplicamos por el número de la tabla. Lanzamos el matamosca contra la mosca que pensamos tiene el resultado correcto. Una vez todos han elegido un número, giramos las moscas aplastadas para ver quien ha dado con la correcta. El primero que la haya acertado se hace con una mosca de madera. Gana aquel que consiga ocho moscas.
Con este juego prática y risas están aseguradas.



Si queremos que aprendan las tablas, sabemos que es necesario un trabajo de repetición y memorización. Si esto lo vamos cambiando y disfrazando con distintos recursos, estarán aprendiendo y repasando sin darse cuenta y sin ser conscientes de estar repitiendo lo mismo una y otra vez.